Que el ahorro energético fuera el tema del momento ya estaba claro mucho antes de que los efectos de los últimos acontecimientos internacionales hicieran aumentar los costes de la energía. El ahorro energético, de hecho, también equivale a la protección del medio ambiente, a la reducción de los costes y es la base de un proceso virtuoso que provoca economías de escala en cascada, así como beneficios para la calidad de vida y la calidad de la producción.
Idromeccanica Lucchini ha implementado desde hace tiempo soluciones tecnológicas y sistemas que favorecen el ahorro energético también en sus invernaderos y garantizan una balanza económica y ambiental mejorada.
Un buen diseño
A la base de un sistema de invernaderos de bajo impacto energético hay un buen diseño. A pesar de si el cultivo en cuestión es más o menos intensivo de energìa, antes de poner en marcha un invernadero hace falta diseñar un sistema que reduzca los residuos y los costes operativos. La base del diseño de Idromeccanica Lucchini es siempre la salud y la productividad de la planta y, en función de esto, los técnicos de Lucchini diseñan una planta eficiente con el menor consumo de energía posible. La arquitectura de los volúmenes y del ambiente de trabajo son de hecho fundamentales para dar al invernadero las características climáticas ideales para la salud y la productividad de la planta. Lucchini responde a estas necesidades con sistemas pasivos e instalaciones activas.
Sistemas pasivos
Para proporcionar un menor consumo de energía es necesario poder utilizar sistemas que estabilicen mejor la climatización del ambiente interior del invernadero sin recurrir a instrumentos de calefacción o refrigeración. Idromeccanica Lucchini actúa con varias medidas a la vanguardia que permiten obtener la temperatura, la iluminación y la humedad ideales según el tipo de planta.
Las cubiertas de doble película trabajan en la irradiación solar y la gestión térmica y reducen sensiblemente el uso de los componentes eléctricos térmicos.
- Una ventilación pasiva compuesta por ventanas y aberturas estratégicas en la superficie del invernadero, gestionada por un software inteligente enriquecido con modelos predictivos, reduce el intercambio de energía con el exterior del invernadero para conservar la energía almacenada naturalmente en el interior, permitiendo al mismo tiempo la correcta aireación para el bienestar del cultivo.
- Los plásticos resistentes a la nieve, al granizo y al viento y de muy larga duración, resultan también ecológicos y más ventajosos que el binomio hierro-vidrio. También aíslan mejor el invernadero y ahorran energía y, por lo tanto, de consumen de energía.
- Las pantallas termo sombreantes protegen la planta y permiten gestionar mejor la luz solar.
- El coating en la estructura o en las envolturas exteriores del invernadero, ayuda a disipar el calor del verano disminuyendo la necesidad de refrigeración mecánica y da más luz a la planta en invierno, reduciendo la necesidad de iluminación y calefacción. Con el mismo espectro solar, bloquea el rayo corto de luz que crea el exceso de calor, pero en su lugar permite la fotosíntesis.
Climatización activa o generación de energía
Para ahorrar energía, además de equiparla con sistemas pasivos, es necesario diseñar un invernadero que incluya también una climatización activa y aparatos capaces de producir energía. Idromeccanica Lucchini es capaz de suministrar este tipo de aparatos para integrar mejor el invernadero y convertirlo en una herramienta ecosostenible y altamente productiva.
- Una climatización activa (tanto de calefacción como de refrigeración) alimentada no con energías fósiles, sino con fuentes renovables. La regeneración en biomasa, el biogás y la geotermia generan una economía circular donde los residuos de las plantas se reutilizan para el invernadero. La planta se gestiona de forma computarizada a través de sensores y sistemas predictivos que minimizan el consumo de energía. Con estas herramientas también es posible almacenar tanto energía como agua, para hacer que el invernadero sea independiente y autónomo incluso en momentos de crisis. Los paneles fotovoltaicos para la producción de energía se pueden colocar tanto en el almacén como en el cultivo para la creación de verdaderos invernaderos fotovoltaicos verticales farming o hidropónicos.
- La colocación de los paneles se realiza después de un cuidadoso estudio de cálculo expositivo y de grado de transmitancia, de manera estratégica para optimizar el rendimiento del panel y para homogéneneneizar la luz solar para no crear conos de sombra o calor excesivo. La energía producida se utiliza para las funciones del invernadero y para el bienestar de la planta. En un futuro próximo también será posible vender el exceso de energía producida.
